Alonso y la emoción de su vuelta de Q1: «Podemos ser competitivos»

Tiene estas cosas. Cuando menos se le espera, cuando menos oportunidades hay de sobresalir, lo hace. Destaca. Sin querer unas veces, otras sin querer queriendo. También la adrenalina, el efecto de ver que las cosas pueden ir a mejor. O la emoción.

Así lo hizo Fernando Alonso en la primera ronda de la clasificación de Silverstone luego de dar por hecho una realidad para la carrera de mañana que no es otra cosa que salir amarrado al último lugar por las penalizaciones que arrastra su motor Honda. Y ahí, entre todo y pasar 5 décimas antes de que el semáforo se pusiera en rojo, logró sacar el mejor tiempo en una Q1 para arriesgarse sin nada que perder con los neumáticos slicks-junto a Ocon, que pasó sexto-, mientras el resto se mantenía con los intermedios. Maniobra al límite pero correcta. 

Mclaren

Mientras, en el garaje, los de Woking con Zak Brown a la cabeza, sonreían en un sábado en el que teóricamente no ocupaban estos puestos desde el año 2013 y en el que esta vez cuentan con alguien que bien les puede llevar a estas sorpresas, aunque hoy sea de forma más categórica que una propia realidad.

«Arriesgamos un poco al final, creo que hubiesemos pasado con las intermedias, decidimos optar por las de seco para tener una referencia de cara a mañana, por si las condiciones son similares. Casi no cruzamos la meta pero al final salió bien, nos sirve de cara a mañana, creo que podemos ser competitivos y que un poco de caos nos puede venir bien», comentaba hacia Movistar+. 

«Buen momento y para los fans, que tienen las mismas ganas que nosotros de vernos luchando por las Pole Positions y victorias y ahí arriba. No los oyes en el coche, los veía en pie en las gradas. Estoy contento por el equipo, que está trabajando horas extra cambiando motores. Verse ahí arriba es bueno para todos, aunque sea sólo momentáneo», añadía. 

Aún así y luego de ello y pasar con ambos coches a la segunda ronda, su compañero Stoffel Vandoorne le ganó la partida por primera vez pasando a la Q3 el piloto belga sin nada de por medio con Alonso, que se mostró contento con su posición de hoy, 13º:»El tráfico no afectó», decía. «Fue un poco de emoción, por haber cruzado la línea de meta con seis o siete segundos de espacio. Pero la vuelta fue buena, no tuve a ningún piloto por delante. Es el tiempo que tenía hoy. No queríamos entrar en la Q3, porque mañana sales último pero con las ruedas usadas de la Q2. Vamos a salir últimos, pero con ruedas nuevas. La posición 13º es perfecta».

Caso parecido al que se encontrará mañana con Daniel Ricciardo después de que un problema en su coche le impidiera finalizar la Q1, por lo que saldrá un puesto por delante de él. «Que (Riciardo) tire adelante, que yo intentaré seguirle», sonreía. «Creo que él tiene más posibilidades que nosotros. Pero si él puede abrir camino y crear un poco de confusión con adelantamientos al límite y podemos sacar beneficio, bienvenido sea».

La emoción, su lugar… tiene estas cosas.