Fórmula 1
Los cambios del reglamento técnico de la Fórmula 1 para 2018
El 2017 fue para la Fórmula 1 un año de cambio radical, introduciendo una serie de normas que le darían un lavado de cara a los actuales monoplazas. Los cambios, sobre todo estéticos, que trae el reglamento de 2018 no serán tan llamativos, pero sin duda darán de que hablar a todo aquel que se anime a ver una carrera. Vamos a comenzar explicando los cambios más simples que trae este año el reglamento técnico, como la prohibición de las aletas de tiburón y las polémicas “T-Wing” que decoraban en 2017 las tapas motor de los coches.
Y es que los equipos aprovecharon un vació legal en los artículos que delimitaban las zonas donde estaban prohibidos los elementos aerodinámicos para implementar estos pequeños alerones, que se fueron volviendo más complejos a lo largo de la temporada y que pretendían ayudar a mejorar la eficiencia del alerón trasero y ayudar a generar algo de carga aerodinámica.
Por su parte, las aletas de tiburón no son algo nuevo en la F1. Estas ayudan a redirigir el flujo de aire lateral hacia la parte trasera del coche y a aumentar la estabilidad del mismo al cambiar de dirección, algo que es bastante útil. A pesar de ello, estéticamente no parecen agradar a todo el mundo y, a pesar de que algunos equipos alegaban que era mejor mantenerlas para tener mas hueco para publicidad, finalmente han sido eliminadas de los planes del año que viene junto con sus compañeros anteriormente mencionados, los T-Wing.
Vamos ahora con otro elemento que creó controversia las últimas temporadas: la suspensión. Este elemento trae a los ingenieros de la FIA de cabeza, ya que los equipos no paran de encontrar formas para aprovechar el funcionamiento de esta pieza para obtener ventaja. Este año han prohibido una solución que pudimos observar en equipos como Ferrari o Red Bull, que implementaron un mecanismo para hacer variar la altura del monoplaza dependiendo del ángulo de la dirección.
Los grandes protagonistas de esta era híbrida, los motores, no verán ningún cambio en su arquitectura. Sin embargo, si que se verán reducidos en número, ya que los equipos sólo contarán con 3 unidades de potencia antes de verse penalizados, cuando antes tenían hasta 4.
Sólo los Mercedes, los Red Bull, los Toro Rosso y uno de los Renault consiguieron acabar la temporada pasada usando tan sólo 3 unidades de alguno de los elementos de sus unidades de potencia. Por otra parte, equipos como McLaren con su poco fiable motor honda o los propios Toro Rosso, llegaron a sumar de 9 a 12 versiones de algunos de estos elementos. ¿Qué quiere decir esto? Pues que o bien se da un paso de gigante en cuanto a fiabilidad o sin duda en 2018 veremos una gran cantidad de penalizaciones como los pilotos no mimen mucho sus motores.
Y hablando de penalizaciones, para no seguir tirándonos de los pelos calculadora en mano cada vez que anuncian alguna para tratar de averiguar el orden de parrilla llegado el domingo, la FIA ha decidido simplificarlas. A partir de ahora, cualquier piloto que acumule más de 15 posiciones de sanción, empezará la carrera al final de la parrilla. Si más de uno acumula estas sanciones, se les ordenará al final de la parrilla en el mismo orden en el que hayan recibido las mismas.
Por otro lado, mientras que los motores se reducen en número, debemos dar la bienvenida a un nuevo neumático. Pirelli introduce un compuesto hiperblando, decorado con líneas rosas. La gama completa de gomas ordenadas de más blando a más duro ahora quedaría así: hiperblando (rosa), ultrablando (morado), superblando (rojo), blando (amarillo), medio (blanco), duro (azul), superduro (naranja) y los dos compuestos de lluvia intermedia y extrema (verde y azul respectivamente). En teoría estas deberían ser mucho más blandas y rápidas que las de otros años.
Para terminar, vamos con el tema del que todo el mundo habla para el año que viene. La FIA siempre ha abogado por cambios en el reglamento que supongan una evolución hacia un deporte más seguro y que no suponga un riesgo serio a la hora de sufrir accidentes que, lamentablemente, siempre serán inevitables en un mundo como este. Es por eso que ha decidido implementar un sistema de seguridad para la cabeza de los pilotos conocido como el HALO, que entrará a formar parte de los monoplazas en 2018.
El HALO es una pieza de carbono que rodea el cockpit y que pretende proteger la cabeza del piloto en caso de accidente. Es un elemento que ya hemos visto en tests desde hace dos años y que, en general, no parece gustarle a los fans, que creen que contribuye negativamente a la estética del coche y que va en contra de la filosofía de la Fórmula 1. Otros en cambio, creen que se debe hacer todo lo posible por hacer este deporte más seguro y que ya era hora de que la FIA introdujera un elemento como este.
Aunque el diseño básico del HALO es el que se muestra aquí, los equipos tendrán cierta libertad para jugar con el impacto aerodinámico que suponga, por lo que seguramente veremos varias versiones adornando los coches del año que viene como ya vimos hacer a McLaren en los test de Abu Dhabi de este año.