Técnica
Compresores eléctricos
Los fabricantes del sector de la automoción cada vez necesitan buscar tecnologías que hagan más eficientes sus motores. Una de estas tecnologías se lleva empleando muchísimo tiempo. La sobrealimentación. Como ya explicamos en otro artículo técnico, la mayoría de la sobrealimentación se realiza por medio de compresores, ya sean mecánicos o de turbina-compresor
El problema es que ambos métodos tienen sus problemas, pero hoy os hablaremos más concretamente de una nueva tecnología que emplean ya ciertos fabricantes como AUDI en sus nuevos motores y que elimina uno de los mayores problemas de los turbo-compresores.
Nos referimos por supuesto al Lag. Esto es lo que se le conoce como retraso en la respuesta del turbo cuando aceleramos a fondo, y el motor digamos que, tarda en responder.
Esto es debido a que el turbo comprime aire, y para comprimir aire necesita alcanzar un régimen de giro determinado, esto solo se consigue haciendo circular más gases de escape por la turbina de escape, y esto solo se consigue haciendo entrar más combustible en la cámara de combustión, es un círculo vicioso.
Pues bien, los fabricante se han sacado de la manga un sistema bastante, lógico, y no es otro que hacer un turbo digamos, independiente, y que no esté ligado a la cantidad de gases de escape que genera el motor.
Esto se consigue de una manera tan sencilla como la de que el compresor, sea movido por un motor eléctrico, en logas de por los gases de escape. Si has leído algo sobre coches eléctricos sabrás que la mayoría poseen una aceleración mucho más notable que la que proporciona un modelo con motor de combustión.
Esto es debido a que un motor eléctrico ofrece mucho más par y desde vueltas mucho más bajas que un motor de combustible. Esto significa que la respuesta puede ser más agresivo o en este caso, rápida.
El turbo eléctrico lo conocimos en la competición, aunque era muy complejo y a veces pecaba de poca fiabilidad. La evolución de este elemento se ha ido macerando estos últimos años, hasta conseguir una versión de calle con un precio no prohibitivo y con un compromiso de fiabilidad alto.
Los turbos eléctricos funcionan de forma similar a los turbos tradicionales, sin embargo, en lugar de turbina de gases de escape incorporan un pequeño motor eléctrico, lo que le permite entregar un par motor alto incluso a regímenes bajos.
Las ventajas de este turbo eléctrico son precisamente algunos de los puntos negros del turbo tradicional, como es la completa eliminación del LAG, esto es, el lapso de tiempo que pasa desde que se pisa el pedal hasta que el turbo entrega la potencia. Por otro lado, al funcionar de modo más eficiente se reduce también el consumo.
De momento la idea de estos turbos eléctrico es la de que vayan acompañado del turbo principal en el motor, y que su funcionamiento solo sea el de hacer inexistente el Lag comentado, creando esa sobrealimentación a bajas vueltas.
Sin embargo, de momento no todo son ventajas ya que, los turbos eléctricos son costosos y pesados, y un Twin Turbo podría actualmente ofrecer un rendimiento muy similar a un coste bastante menor.
No tendremos que esperar mucho para la llegada de este tipo de motores. Eso sí, primero llegarán para sustituir a los actuales turbos y paulatinamente se alinearán con la tecnología híbrida.