Rally
Cristina Gutiérrez y su segundo Dakar: «Vamos a darlo todo»
Cristina Gutiérrez ya está en Lima a horas del arranque de la 40ª edición del Rally Dakar 2018. Tras hacer historia el año pasado y convertirse en la primera piloto española en terminar esta competición en coches, ahora mira a objetivos más altos como un top20.
A sus 26 años, la burgalesa afronta por segunda vez esta prueba, y con mucho mejor preparación que el año pasado. Esta vez ha habido menos prisas y más preparación, y la piloto rebosa de ganas de arrancar su Mitsubishi Montero esta mañana en Perú.
«El año pasado, sin casi sponsors ni nada me surgió la oportunidad de competir en el Dakar. Si en octubre se cierran las inscripciones, en septiembre empezó todo y en menos de un mes conseguí la mitad de presupuesto. Fue todo muy locura. Yo estaba preparada, así que me busqué un poco las cosas», nos contó a SoyMotor hace tres semanas, durante la charla Dakar del Campus Féminas Off Road, en Masía Pelarda –Teruel–.
Su copiloto esta vez será Gabi Moiset, un hombre con la suerte de tener a sus espaldas ya múltiples ediciones de esta prueba. Juntos competirán en la categoría T1.1. «Tengo ganas ya de que empiece, es una temporada muy larga pensando en el Dakar. Son casi ocho o nueve meses de preparación. Ahora vamos para allá para darlo todo», contaba en declaraciones a SoyMotor.com.
La prueba de fuego llega en sólo unos días y se extenderá hasta el 20 de enero a lo largo de Perú, Bolivia y Argentina. Gutiérrez experimentó en sus propias carnes lo que es que las cosas vayan mal en plena etapa, algo con lo que todos cuentan una vez traspasada la línea de salida. Junto a Pedro López, su copiloto en el Dakar 2017, llegó a vivir una jornada de 17 horas en el coche.
«En una etapa tardé 17 horas y acabamos molidos, pero luego se te olvida. Cuando vi imágenes, no me creía ni la mitad, me preguntaba ‘¿tan mal lo pasé?’, pero luego te quedas con lo bueno, con la satisfacción de llegar», reconoce.
Acabar en esa ocasión desató su pasión por volver. Pero preparar cuerpo y mente para lo impredecible no es tarea fácil. «Entreno al 50 por ciento, la parte física es muy importante, pero no olvidemos la parte mental. En una carrera de resistencia como el Dakar hace falta mucha cabeza, no bajar los brazos y creo que eso es el otro 50 por ciento. Entrenamos a diario durante meses y en estas dos semanas se va a ver el resultado», terminó la burgalesa.