¿Cuáles fueron los errores de McLaren en la Indy500?

Todos los cómicos errores que McLaren, con Zak Brown a la cabeza, tuvo durante su regreso a las 500 millas de Indianápolis no comienzan durante esta semana, que comenzó la clasificación, sino que empezaron hace meses. Para poner en situación, una semana antes de que Fernando hiciera el primer test, se dieron cuenta que no tenían un volante para el coche. Fernando Alonso al borde del abismo: «Si no podemos lograrlo, será porque no nos lo merecíamos»

Zak Brown, jefe del equipo McLaren en Formula 1 y en esta expedición dentro de las 500 millas de Indianápolis, comentó el lunes que el equipo no tenia el conocimiento necesario ni estaba lo suficientemente preparado para poder afrontar este reto. Horas después de que Alonso no consiguiera clasificarse para la carrera, Bob Fernley, la cabeza de la operación, fue despedido mientras que Brown volvió a Woking para digerir el vergonzoso espectáculo dado por los ingleses.

«Sinceramente creo que no estábamos preparados.» afirmaba Zak Brown. «No merecíamos estar en la carrera y la culpa es toda nuestra. Ni si quiera pudimos demostrar lo que podíamos hacer. Nos hemos decepcionado a nosotros mismos.» Todo este desastre empieza cuando el coche ni si quiera estaba listo para los test en abril. Brown tuvo que comprar un volante a Cosworth para estas prácticas, por lo que ahí empezaron los problemas.

Fuente: twitter @McLarenIndy

Según el propio Zak, «Zak Brown no debería ir rondando por ahí rogando un volante para su coche. Todo este desastre ha sido una falta tremenda de organización y de gestión.» También, el equipo tuvo un problema cosmético desde estos test, ya que el coche no tenía el color que el equipo deseaba, no era su «naranja papaya».  A pesar de que Carlin estaba trabajando en ello, cuando el accidente sucedió no pudieron tener un coche de repuesto como otros equipos tenían, por lo que se sintieron estúpidos.

Los otros dos pilotos que llevaban un coche de Carlin no lograron clasificarse para la carrera. A parte de todos estos problemas, tuvieron otros que no estaban al alcance de su mano. Comenzando por problemas en el motor el primer día, siguiendo de un pinchazo del que el equipo no se dio cuenta ya que habían comprado unos sensores equivocados.

«Estoy muy enfadado conmigo mismo. Iba a ser un evento en el que tendríamos que plantar cara y demostrar lo que podíamos hacer. Lo teníamos que hacer por Fernando y por nuestros aficionados. Me gustaría pedir perdón a todos ellos, estamos igual de decepcionados.» comentaba el inglés, incapaz de creer lo sucedido.