Fórmula 1
Daniel Ricciardo: «No me ha costado amoldarme al McLaren»
McLaren afronta el Gran Premio de Emilia Romagna como el contendiente más en forma de la zona media de la parrilla
Imola será la próxima parada de la temporada 2021. Sin duda, es uno de los circuitos con más historia, lugar de momentos inolvidables para lo bueno y, también, para lo malo. Al ser la casa de Ferrari, es normal que McLaren siempre pase más desapercibida en este iónico escenario, pero los de Woking tienen motivos para estar satisfechos, pues actualmente son los rivales a batir en la zona media de la parrilla. En la prueba inaugural, el Gran Premio de Bahréin, demostraron su poderoso rendimiento en lo que a ritmo de carrera se refiere, y en San Marino esperan confirmar sus buenas sensaciones.
Lando Norris, en su tercer año junto a la escudería británica, ha comenzado la campaña de la mejor manera posible gracias al cuarto puesto alcanzado en Sakhir, donde evidenció una espectacular solidez. De hecho, el joven piloto acostumbra a arrancar las temporadas como un auténtico ciclón, pero, según avanzan las carreras, suele tener problemas para mantener el nivel. Norris tiene la esperanza de que esta situación no se repita: «Nuestro objetivo es progresar y aprovechar todo nuestro potencial en cada Gran Premio. Aún existen áreas en las que podemos mejorar. En Bahréin vimos lo cerrada que estará la competición a lo largo del año, lo que provocará luchas muy interesantes sobre la pista».
En cuanto a Imola, el británico destaca la dificultad que conllevará realizar adelantamientos: «La posición de salida será clave, ya que las opciones para sobrepasar a nuestros adversarios serán limitadas. El trabajo que realicemos para encarar la clasificación y la carrera con garantías será fundamental. Hemos empezado 2021 con buen pie, y deseamos seguir por esta senda positiva con la obtención de una buena cantidad de puntos».
El compañero de Norris, Daniel Ricciardo, afronta su primera temporada vestido de naranja y, a pesar de que su actuación en Sakhir no fue tan brillante como la del británico, concluyó séptimo, en lo que fue un debut prometedor. Su meta es progresar exponencialmente con cada kilómetro acumulado en su nuevo monoplaza: «Materializar mi debut con McLaren fue una gran experiencia. Todavía hay muchas prestaciones por extraer. El trabajo en la fábrica ha sido muy duro, siempre con la mirada puesta en completar una buena temporada. Pensé que al principio me costaría amoldarme a mi nueva máquina, aunque no ha sido así».
El australiano llega a Imola con gratos recuerdos tras lo sucedido en 2020: «Es una pista legendaria, de la vieja escuela. Se compite a una gran velocidad, y su configuración no deja margen para los errores. Volver después del podio que conseguí el año pasado me produce una sensación muy reconfortante. Tengo en mente ayudar al equipo en base a la gran experiencia que tuve en aquella ocasión».
En estos momentos, McLaren ocupa exactamente la misma posición en la que finalizó en 2020, la tercera. Con 18 puntos, posee 6 más que su inmediato perseguidor, Ferrari. Todo apunta a que, tal y como sucedió en la pasada campaña, no se conocerá el nombre del tercer clasificado del mundial de constructores hasta la ronda final. Muchos equipos con un potencial muy similar optan al mismo premio. Por ahora, McLaren y Ferrari han tomado la delantera, pero Aston Martin y Alpine no han dicho, ni mucho menos, su última palabra. El espectáculo solo acaba de empezar.