Descubre el circuito de Interlagos

El gran circo se prepara para su última actuación del curso. Lo hará en un escenario habitual en el tramo final de cada temporada: el Autódromo José Carlos Pace, también llamado Interlagos. Su nombre antiguo se debe a su localización, entre dos lagos artificiales: el Guarapiranga y el Billings. Fue rebautizado en honor al malogrado piloto brasileño. Se estrenó en 1973 y fue profundamente remodelado en 1990. Consta de 4309 metros. 15 son sus curvas, 10 de ellas a izquierdas. El récord del circuito está en 1:11:473, por Juan Pablo Montoya en 2004. Son varios los factores que lo hacen muy peculiar. 

El circuito se recorre en sentido antihorario, lo cual supone un desafío para los pilotos. Éste es aún mayor este año, con los nuevos monoplazas, que provocan mayores fuerzas. La gran variedad de características supone otro reto, pues a los rápidos sectores 1 y 3 se une el revirado sector 2.

El primer sector lo conforman el final de recta de meta, las S de Senna y la recta trasera. Es un sector que pide mucho motor y poca ala, para poder desarrollar altas velocidades puntas. Las S de Senna es una curva particularmente difícil, pues es muy fácil bloquear neumáticos y tiene una fuerte pendiente descendiente. Además es ciega. Constituye el mejor punto de adelantamiento del circuito, aunque también es crucial su trazo para afrontar la posterior recta, donde también existe un buen punto de adelantamiento. En ella se puede utilizar el DRS, con detección entre las curvas 1 y 2.

Fuente: f1.com

Comienza en la recta de atrás el sector 2. Al final de ella se encuentra la Descida do Lago. Tras ella viene una larga sucesión de curvas lentas, desde la 4 hasta la 11, que piden mucha carga para tener buena tracción. Este sector está lleno de subidas y bajadas que lo hacen bastante difícil a los pilotos. También resulta muy visual de cara al espectador. 

El último sector comienza con la curva de Junção. En ella es fundamental obtener buena tracción, para afrontar la subida dos boxes. Es una zona muy espectacular debido a la fuerte pendiente y las dos curvas a izquierdas. Se enlazan a la recta de meta para completar un total de 15 segundos con el pedal a fondo. En la recta de meta está la segunda zona de DRS. 

El circuito está repleto de baches, a pesar de los esfuerzos por corregirlos. Eso se suma a todo lo mencionado anteriormente. Por ello, el balance del coche es difícil de conseguir, necesitando conjugar carga aerodinámica para las curvas rápidas, tracción para las lentas, estabilidad y velocidad punta.

Las condiciones locales también influyen mucho. En primer lugar, el autódromo está a 800 metros sobre el nivel del mar. A esa altura, la menor densidad del aire influye mucho en el rendimiento del coche. También supone un factor fundamental la climatología. Puede variar desde el calor más asfixiante hasta el diluvio en poco tiempo. Es por ello por lo que hemos disfrutado de carreras imprevisibles a lo largo de los años.

Por último, hablaremos de la elección e importancia de los neumáticos. Pirelli ha elegido una gama intermedia, con Superblando, Blando y Medio. Eso supone el estreno del Superblando en Brasil. El neumático que más sufre es el trasero derecho. Interlagos demanda mucho a los neumáticos debido a sus curvas rápidas. No es un asfalto muy abrasivo.

Fuente: Pirelli.com

En conclusión, Brasil es un lugar mítico en el que se unen todos los ingredientes necesarios para hacer grandes carreras, e incluso para lograr momentos míticos. Por ello, no haced planes que os impidan disfrutar de lo que nos espera este fin de semana.