Fórmula 1
Dia de mucho trabajo para Red Bull y Pierre Gasly
Gasly se hizo cargo del RB15. Primer contacto del francés con el monoplaza. Conformes con el trabajo realizado a pesar de perderse la última hora a causa de un trompo de Gasly.
Segundo día de test en el circuit de Barcelona-Catalunya, donde el piloto francés Pierre Gasly se puso a los mandos del RB15 del equipo Red Bull. Gasly completo 92 vueltas al circuito catalán mostrando un sólido rendimiento, un trompo hacia el final del día acortó el programa de trabajo del equipo austriaco. De igual manera el equipo está satisfecho con la cantidad de datos recobrados. Para el francés son las primeras vueltas con su nuevo equipo en el coche para 2019.
«El día fue positivo y me sentí muy feliz de estar detrás del volante después de las vacaciones de invierno», comenzó diciendo Gasly luego de bajarse del RB15. “El primer sentimiento es bueno. Fue importante para mí sentirme cómodo en el coche y nos las arreglamos para hacer más de 90 vueltas».
Gasly explicó el incidente en el cual se salió de la pista en la curva 10: «Empecé a empujar y salí de la curva 10, me puse en quinta marcha y perdí la parte trasera del coche. Fue bastante molesto perder la última hora de prueba», explicó el piloto francés.
Red Bull perdió la última hora de la tarde a causa de este incidente, si bien es importante le han restado importancia porque los datos fueron suficientes en esas 92 vueltas: «Probamos muchas cosas y obtuvimos mucha información buena, hay un buen potencial. Por supuesto, todavía tenemos mucho trabajo por hacer, pero para mí, aparte del último fragmento, el primer día fue excelente», terminó diciendo Gasly tras su primer contacto con el RB15.
El jefe de Ingeniería de Carreras, Guillaume Rocquelin, dejó datos del trabajo realizado por el equipo austríaco: «Antes del incidente de Pierre, habíamos estado haciendo muchas tandas cortas para recopilar datos. Pierre estaba entonces en una vuelta rápida y, como era de esperar, estaba encontrando el límite. Es comprensible que no sea feliz, pero no es un desastre», minimizó el ingeniero.