El Ferrari de 2018 será una realidad

Ferrari, que siempre ha demostrado ser una gran marca dentro del mundo de la Fórmula 1, ha pasado las pruebas de nivel de que tiene puestas las FIA.  El nuevo chasis de la marca del «cavallino rampanti»  ha pasado otro año más las pruebas de crash test y verificación del máximo órgano de la competición a nivel internacional. Ha pasado los crash test a de estilo frontal lo que supone un paso más que imporante ya que el chasis, según la homologación de la FIA, es más que válido para que pueda competir el próximo año. 

En este tipo de pruebas los monoplazas deben resistir pruebas de choque de esta hasta 54 km/h para los choque frontales, 36km/h para los choques laterales y de hasta 9 km/h para los choques desde la parte de atrás. Aunque puedan ser velocidades realmente bajas lo que sí permiten estas pruebas, es saber como de efectivo es la absorción de las fuerzas que el chasis soporta durante un accidente, lo que puede suponer una solución muy importante en materia de seguridad para los pilotos. Ademas el próximo año los monoplazas deberán lleva incorporado, el tan sonado halo, que tanto dio que hablar la pasada temporada.

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Además de estas pruebas dinámica, también se realizan un total de 13 pruebas estáticas al chasis con el objetivo de evaluar la efectividad tanto a nivel frontal, lateral como trasero. Según la propia normativa de la Federación Internacional del Automóvil, tan solo el chasis puede deformarse dentro de unos parámetros establecidos. Si el propio chasis cumple con esa deformidad entonces será apto para que se pueda probar en pista sin poner en riesgo al propio piloto.

El próximo 22 de febrero, cuatro días antes de comenzar la pretemporada, Ferrari presentará su nuevo bólido de 2018 con el que intentará afrontar un nuevo mundial. El objetivo será el de poner las cosas complicada al equipo Mercedes que todavía no ha anunciado cuando será la presentación ante la prensa de su nuevo monoplaza.