Fórmula 1
Opinión: Fernando Alonso no es versátil
No se cuantos monoplazas ha pilotado en el último año, ni se si irá a Le Mans este año o el que viene, lo único que se es que es de admirar que Fernando Alonso se atreva a darnos este espectáculo. El año pasado Antonio García se quedó a un pelo de quedar por delante de su compañero de Corvette, tras una batalla campal que duró 24 horas, este año son más los españoles que nos representarán en Daytona. ¿Qué debemos esperar de estas 24 horas?
Para empezar, si eres de los que nunca ha visto una carrera de 24 horas, no te preocupes. A pesar de que hay varias categorías, de que son muchas horas y del cambio horario, hay distintas maneras de identificar a los pilotos y de saber sus posiciones reales. Ten a mano una tablet con la App de IMSA, la vas a necesitar si no quieres perderte en clasificaciones de varios colores e intermitentes. Desde hace dos años, en Le Mans siempre hago lo mismo: App en la tablet, Twitter en el móvil, carrera en el ordenador y rosario en las manos. El año pasado fui de los que aluciné con la retirada de Kobayashi, anteriormente sufrí con el accidente de Frijns y todavía un poco antes veía el cambio de piloto de Gené.
Lo complicado para un aficionado medio, entre los que me incluyo, es saber donde acaba el fanatismo y empieza la realidad. Hace no mucho me llamaban ‘anti’ en mi entorno cercano. Supongo que esto varía en función de quien te oye, pero el mensaje que tengo es el mismo que entonces: Fernando Alonso está muy muy cerca de su retirada, tanto que creo que ya veo una fecha, y la firmaría ante notario sin problema. Nuevos retos, categorías y, sobretodo, ganas de calmar ese hambre de ganar dejan claro que no estamos ante un joven que busca encontrar patrocinadores para así poder llegar a su objetivo, sino ante un hombre que ya ha conseguido todo lo que ha podido en Formula 1, aunque tenga una espina clavada.
Que él mismo se haya pagado el tema Daytona, bajo la marca Kimoa, deja claro que sabe que si no es deportivamente, al menos podrá ganar económicamente. Sí, la aventura le ha salido por un pico, pero creo que Kimoa ahora mismo sin Alonso detrás sería una tienda de surfistas hippies en Hawái, y Alonso sin esta marca sería un piloto de pago menos disimulado, a pesar del talento.
Había gente que dejaba lugar a pensar si la opción de que se tomara un año sabático era la mejor. ¿Hola? ¿Hablamos de la misma persona? Fernando es competitivo, amante de la alta velocidad y de la exigencia tanto física como mental. Si ahora mismo a Alonso le quitas el motorsport, sería poco menos que un vegetal. La mejor muestra es como se comportó tras el accidente de Australia: Entrenando a los dos días. Gente como él es necesaria pero quiero plasmar en nuestras mentes una idea: Fernando Alonso es versatil… ¿O el resto permanecemos demasiado inmóviles? Con esto quiero que nos preguntemos… ¿Por qué no hay más pilotos que tengan sus narices y cambien de monoplaza con tanta asiduidad? Yo os respondo: No tiene nada que perder y mucho que ganar. El asturiano tiene los suficientes años para saber que si no lo hace ahora, no lo hará nunca, pues es complicado que vuelva a tener una edición de Le Mans tan a huevo como esta, si no le pasa como en Indianapolis.
Pero esto no es un canto a la mediocridad, a decir que nos conformemos con verle el tiempo que le queda ni que soportemos como sus fans «entienden» ahora de carreras de 24 horas cuando no saben diferenciar un prototipo de un GT, es un canto a la esperanza de poder disfrutar de alguien maravilloso que se ha cruzado en nuestras vidas. Digo lo mismo de Hamilton o Vettel, ojo, pero creo que ellos tendrán que esperar un tiempo para intentar lo mismo sin ser comparados. Si Alonso consigue la ansiada victoria en Le Mans y en Indiana, el motorsport le deberá lo mas grande que un piloto puede tener: El respeto absoluto de todo aquel que dice no amarlo.
Ahora os recomiendo, desde el más absoluto respeto, que disfrutéis de una carrera apasionante. Disfrutad de un juego de estrategia de 24 horas en las que cada segundo cuenta, en las que los últimos rayos de sol no hacen frenar a estos valientes. Si Le Mans, Spa o Monza son el templo del automovilismo, o Daytona debe ser considerado sitio de culto.