Haas, la suerte inversa

El equipo estadounidense finalizó la jornada de entrenamientos clasificatorios con un monoplaza que fue capaz de entrar en la Q3, pero que se quedó en las últimas posiciones de la misma. 

El Gran Premio de Francia vuelve al calendario, esta vez en el circuito de Paul Ricard, y los de Haas esperan tener mejores resultados que los obtenidos en la clasificación y sumar el máximo de puntos posibles.

El danés, Kevin Magnussen marcó un 1:32.930, lo que hizo que se colocara en la novena plaza, justo por delante de su compañero: «Me estaba yendo bien. Metimos los dos coches en la Q3, pero no pudimos hacer nada más en esa sesión. Fue una buena actuación hasta esa Q3, donde no pude hacer la vuelta, ya que Kimi Räikkönen me adelantó cuando estaba en mi giro más rápido. No tengo ni idea de qué estaba haciendo, y eso significa que no hice una vuelta en la Q3«.

Kevin Magnussen rueda en Paul Ricard. Vía: haasf1team.com

Romain Grosjean protagonizó una bandera roja en esa tanda, ya que perdió el control de su Haas y colisionó con las barreras en su Gran Premio de casa: «Fui a hacer la curva 3 y perdí la trasera del coche. No hay una razón obvia, por lo que tenemos que investigar un poco más. Observaremos los datos. Estaba yendo bien antes de eso, por lo que es extraño y frustrante. No hemos tenido mucha suerte desde Australia, y estaba esperando a que nos fuera mejor este fin de semana. No es lo que queremos, pero la carrera es mañana y daremos lo mejor para volver a la séptima posición, donde deberíamos haber clasificado«.