Honda apunta a un fallo en el diseño del motor como causante de los fallos en los test

El estreno de la nueva creación de Mclaren Honda puede ser calificada como un pequeño gran fracaso tras las dos primeras jornadas de test en el circuito español de Montmeló.

Si durante la primera jornada del lunes, el MCL 32 podía rodar solo durante la jornada de tarde, la actuación del coche en el estreno de Vandoorne no ha sido muy diferente. Dichos problemas han llevado al equipo Mclaren Honda a cambiar el motor en la jornada de mañana al piloto belga, el cual tras un inicio accidentado en el que debía volver al box y marcaba un total de 40 vueltas (nueva unidad de potencia), demostraba una seria carencia de fiabilidad y de potencia.

En declaraciones realizadas por el Señor Hasegawa, el máximo responsable de Honda, indicaba que todo apunta a un fallo del diseño de la forma del depósito de aceite del motor 2017, aunque considera que este supuesto fallo debe ser estudiado de manera más exhaustiva.

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En caso de que se confirmará dicho diagnóstico, el rediseño de esta pieza del motor conllevaría algunos inconvenientes al motorista japonés ya que repercutiría en el espacio y el diseño de la unidad de potencia que estrena esta temporada Honda.

En resumen, un inicio más que decepcionante para el motorista japonés, que de confirmarse las peores noticias haría que el nuevo proyecto de Mclaren Honda llegará al estreno en Australia dentro de menos de treinta dias con una carencia clara a la hora de saber cuál es su verdadero potencial tanto en lo tocante a la fiabilidad como en el rendimiento real de su nuevo motor.