Fórmula 1
Honda satisfecha, Mclaren no
Mclaren-Honda llegaba a Australia en uno de los momentos más delicados de su relación. Los continúos problemas de fiabilidad en el motor Honda durante la pretemporada acabaron por agotar la paciencia de los hombres de Woking y de sus pilotos. El tercer año era el de la redención, el del salto definitivo a los puestos cabeceros de la parrilla. Nada más lejos de la realidad.
Las apuestas sobre a qué vuelta iba a abandonar el Mclaren corrían por el Paddock, no fue así en la pista. El rendimiento del motor es pobre por no decir otra palabra, pero al menos, no se paró, no dio problemas graves que obligaran a sus pilotos mantenerse en el box a la espera de soluciones. Los Mclaren rodaron sin problemas de motor, al fin. Esa es la mejor noticia que se puede extraer de este fin de semana.
Ahora es Honda la que le puede dar la vuelta a la tortilla. Y es que Mclaren se escuda en los problemas de motor para ocultar sus carencias, que también existen. La rotura de la suspensión del coche de Fernando y los problemas de freno que tuvo durante gran parte de la carrera no son culpa de Honda. A cada cual lo suyo y Mclaren tampoco está para tirar cohetes y eso desemboca en un coche moribundo corriendo sin pena ni gloria por el circuito de Albert Park. Décimo durante 53 vueltas gracias a las manos de Fernando.
Boullier fue autocrítico con la actuación de la escudería británica: «El GP de Australia 2017 no será recordado como uno de los mejores momentos de McLaren-Honda, y de hecho hay muy pocas razones para estar alegres», comentaba el director deportivo de Mclaren a lo que añadió: «Volveremos a Woking y Sakura, donde continuará, con una intensidad implacable, nuestro trabajo de desarrollo, en un esfuerzo por igual tanto en el chasis como en al unidad de potencia», afirmaba Boullier.
Más satisfecho se mostraba el representante de la marca nipona, Yusuke Hasegawa, aunque con cautela: «Sabíamos que no sería un fin de semana fácil, pero a pesar de varios problemas, estoy feliz con el progreso que hemos hecho en las dos últimas semanas», comentaba Hasegawa.