Infinity se marcha de Europa

La marca de coches de lujo, Infinity, dejará su producción en Europa Occidental a partir de julio para centrarse en nuevos mercados. Según la compañía, se debe a una medida de reestructuración interna. Con la fábrica ubicada en Reino Unido, a finales de julio se terminarán de fabricar allí los modelos Q30 y QX30 para terminar todas las operaciones en Europa a comienzos del año que viene.

Infinity ya tiene la mirada puesta en otros mercados. La marca asiática tiene pensado centrar sus esfuerzos en China y Norteamérica, mientras que desarrollará algunos pequeños movimientos en Europa del Este, Oriente Medio y el resto de Asia.

La compañía, que llegó al viejo continente hacia 2008, no ha conseguido acumular el éxito que esperaba, limitando su actuación a unos 60.000 clientes, de los cuales, un sexto se encuentra en Reino Unido.

Uno de los puntos importantes que ha jugado en su contra, ha sido su poco interés hacia coches más respetuosos con el medio ambiente, en concreto, hacia el apoyo a los coches eléctricos. Infinity aún se encuentra lejos de apostar siquiera por los híbridos y su inversión en este ámbito es mínima, por lo que llegar a la nueva tasa de 95gm/km de CO2 impuesta en Europa para el próximo año, resulta inviable.

De esta forma, la compañía se centrará en otros mercados, siendo prioridad la fabricación de SUVs. El problema es que más de 250 trabajadores se irán previsiblemente a la oficina de desempleo junto a otros 7.000 de Nissan en toda Europa.

Para la marca empieza un periodo de transición, en el cual tratará de buscar que los actuales clientes no pierdan el servicio de post venta que se requiere tras la adquisición de uno de sus vehículos.