Jörg Zander cree que 2017 será un año de transición para Sauber

El ingeniero alemán Jörg Zander, que este año ha recalado en la escudería Sauber, tras la marcha de  Audi del campeonato mundial de resistencia, ha comentado que el proyecto de la escudería no espera resultados a corto plazo. Debido al rendimiento del monoplaza en 2016, donde parte del transcurso del campeonato se vieron superados por el equipo Manor, el alemán no augura grandes alegrías.

Zander cree que llevar el motor Ferrari 2016 no será una carga para el equipo, y que este podrá alcanzar algunas de las escuderías que estuvieron por delante suya en la pasada campaña. “Quiero ver una clara mejora en términos de rendimiento respecto al año pasado. Todos los que trabajamos en Hinwil lo queremos. Nuestro objetivo es estar en la mitad de la parrilla. En general, 2017 será un año importante para nosotros, para la estructura y para los nuevos procesos y operaciones que deben de implementarse. Somos optimistas en el desarrollo del monoplaza, va por la dirección correcta”, afirmó el ingeniero alemán.

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A pesar de que el nuevo director técnico quiere creer que el motor del año anterior no será una carga, sólo hay que ver cómo sufrió la escudería Toro Rosso en los circuitos donde la potencia del motor tenía una gran importancia. Eso, sin mencionar los problemas económicos que llevan arrastrando varias temporadas. Aunque con el aporte del capital necesario por parte de Longbow Finace, parece que los suizos podrán empezar a levantar la cabeza.

Por eso, Zander es realista y sabe que esta temporada sólo servirá para afianzar las bases de un proyecto que parece ir para largo, centrándose antes de lo normal en el monoplaza de la temporada 2018. “Primero queremos saber el rendimiento que tienen nuestro coche una vez lo hayamos probado en los test de Barcelona, y luego ver dónde estamos en comparación con nuestros rivales. Tras unas cuantas pruebas del calendario nos centraremos en el 2018”, concluyó el ingeniero alemán.