Fórmula 1
La historia de Sauber en la Fórmula 1
Un repaso por la historia del desaparecido equipo Sauber.
Desde su llegada a la Formula 1 en 1993, y con una estructura muy bien organizada, Sauber ha logrado hacerse un hueco y sobrevivir durante 25 años a las exigencias tanto económicas como deportivas que demanda la categoría reina del deporte motor. Además, les dio la oportunidad a numerosos talentos de hacerse un nombre en el gran circo.
EL INICIO
Si bien el equipo Sauber como tal comenzó a existir a principios de los 70, su dueño Peter Sauber solo se dedicaba íntegramente a las carreras de resistencia, llegando a conformar a finales de los 80 una poderosa asociación con Mercedes Benz que le permitió ganar las 24 horas de Le Mans de 1989 junto a pilotos del calibre de Jochen Mass, Mauro Baldi y Jean-Louis Schlesser. Incluso en ese equipo se dio el lujo de contar con tres promesas que pintaban para ser grandes leyendas del motorsport como Heinz-Harald Frentzen, Karl Wendlinger, y nada menos que el futuro heptacampeón de la Formula 1, Michael Schumacher.
LOS PRIMEROS AÑOS EN LA FORMULA 1:
Por otro lado, el 2 de marzo de 1992 se anunció que Sauber iba a entrar a la Formula 1 de cara a la temporada 1993. Los días, las semanas, y los meses comenzaron a correr hasta que llegó el momento más esperado por Peter y su gente, el tan ansiado Gran Premio de Sudáfrica de 1993.
Para aquella temporada Sauber presentó el C12 motorizado por Ilmor, el primer corcel con el que los suizos se lanzaron a hacer sus armas dentro de la elite del motor. Contaban con la experiencia de un piloto terrenal como J.J Lehto y con los destellos de juventud del austríaco Karl Wendlinger.
Tras puntuar en Kyalami de la mano de Lehto, el equipo volvería a encontrarse con los puntos nuevamente en varias ocasiones, obteniendo como resultados más destacables el cuarto puesto del finés tanto en San Marino, como de Wendlinger en la lotería de Monza donde tras capitalizar varios abandonos repitió lo hecho por su compañero. Al final de 1993, Sauber había logrado el primer gran objetivo que era sobrevivir y establecerse en la zona media de la parrilla obteniendo el séptimo puesto en el Mundial de Constructores gracias a los 12 puntos que Lehto y Wendlinger anotaron durante el campeonato.
La temporada 1994 estaba destinada a afianzar los esfuerzos de Sauber en la Formula 1 puesto que dejaban de lado a Ilmor para traer a Mercedes Benz. Sin embargo, la fortuna no estuvo del lado de la gente de Hinwill que cuajaron una performance muy parecida a la del año anterior. Además, su piloto promesa Karl Wendlinger sufrió un terrible accidente en el GP de Mónaco que posteriormente lo marginó de la categoría. Heinz-Harald Frentzen, Andrea De Césaris, y J.J Lehto fueron quienes salvaron los muebles del equipo del buen Peter en aquel infame 1994. Al final de aquel año, decidieron cambiar a Mercedes por Ford.
1995 y 1996 fueron años fructíferos y caóticos al mismo tiempo para Sauber, puesto que en el primeramente mencionado lograron dar un paso adelante y consiguieron los primeros podios en la historia del joven equipo. Además, Red Bull desembarcó como auspiciante del equipo brindándole un jugoso aporte al equipo helvético. Frentzen fue la punta de lanza durante toda la temporada debido a la sustitución de Wendlinger por el novato Jean-Christophe Boullión, y consiguió el primer podio de Sauber en el caótico Gran Premio de Italia de 1995, en el circuito de Monza que vio como vencedor a Johnny Herbert.
La siguiente temporada fue catastrófica en lo que a resultados se refiere, y solo pudieron ubicarse séptimos en la tabla puesto que se vieron mermados al usar el chasis de 1995 adaptado al nuevo reglamento y un motor Ford Cosworth JD V10 que tampoco cubrió las expectativas. Por lo tanto, se veían obligados a abandonar a Ford y encarar un nuevo ciclo como clientes de Ferrari que le iban a brindar el V10 de Ferrari. Paralelamente, firmaron un acuerdo con la petrolera malaya Petronas para construir motores propios, pero la Crisis Económica Asiática de 1997 terminaría dejando esta idea en la ruina.
LOS MOTORES FERRARI Y EL HISTÓRICO CUARTO PUESTO DE 2001
Luego de sellar su acuerdo como clientes de Ferrari, comenzó quizás uno de los capítulos con más altibajos para Sauber. A partir de 1997 y hasta 2001 comenzaron un par de temporadas efímeras donde los resultados no siempre fueron los favorables para el equipo de Hinwill, puesto que estuvieron varias temporadas estancados en el corazón de la parte media del pelotón siendo el conejillo de indias de Ferrari. Sin embargo, en el diluvio y caos del Gran Premio de Bélgica de 1998 pudieron volver a pararse en el podio gracias a un manejo soberbio de Jean Alesi que sobrevivió a las peligrosas condiciones climáticas para llevar el coche hasta el final.
Recién en 2001 Sauber pudo mostrar un rendimiento superior al mostrado en sus años anteriores. El nuevo C20 pilotado por el talentoso Nick Heidfeld y los destellos de juventud de Kimi Räikkönen llevó al equipo de Hinwill hacia una posición mucho más poderosa de la que solían estar. En aquella temporada, ambos pilotos auparon el equipo al cuarto lugar en la tabla de constructores gracias a una cuantiosa cosecha de 21 unidades contando el podio de Heidfeld en Brasil y dos cuartos puestos de Räikkönen como los mejores resultados de un equipo Sauber que parecía tocar el cielo.
Por otro lado, Helmut Marko decidía vender parte de las acciones que tenía Red Bull en el equipo ante la negativa de Peter Sauber de colocar a Enrique Bernoldi en detrimento de Räikkönen, quien hasta su debut era visto de manera controversial en el paddock debido a su escasa experiencia con monoplazas.
Si bien luego de esa temporada no volvieron a ostentar más una posición similar, entre 2002 y 2005 supieron sobrevivir como equipo independiente gracias a contar con pilotos de nivel como Nick Heidfeld, Jacques Villeneuve, Felipe Massa, Frentzen y el italiano Giancarlo Fisichella entre otros.
El mejor resultado del equipo en ese periodo fue el sorpresivo tercer lugar de Frentzen en el lluvioso GP de EEUU de 2003. Por otro lado, en 2005 se supo que BMW compraría gran parte de las acciones del equipo a Credit Suisse para competir en 2006, el 20% de las acciones quedaban en manos de Peter Sauber. Por lo tanto, en el Gran Premio de China de 2005 terminaba el primer ciclo de Sauber en la F1 con Massa dándole los últimos puntos.
EL CICLO DE BMW Y EL RETORNO TRAS LA CRISIS
De cara a 2006 Sauber pasó a llamarse BMW Sauber, y junto a la renombrada automotriz alemana comenzó un corto periodo de tres años donde lograron poles, podios y una victoria muy recordada de la mano del polaco Robert Kubica. Sin embargo, el fracaso deportivo de 2009 -temporada en la que se esperaba que pelearan el campeonato-, y la Crisis Financiera de aquellos años hicieron que el fabricante teutón abandonara el gran circo, recuperando Peter su equipo.
En 2010, Sauber volvió a la Formula 1 con el histórico Pedro De La Rosa y el japonés Kamui Kobayashi. Pese a tener una temporada irregular, ambos pilotos se las apañaron para conseguir 44 valiosos puntos que los depositaron en el octavo lugar de la tabla, cumpliendo un papel decoroso.
Para la temporada siguiente llegó al equipo de Hinwill un talentoso mexicano que también traía consigo un buen aporte económico. En su temporada debut, Sergio Pérez no logró estar a la altura de su compañero Kobayashi, pero colaboró para que el equipo volviera a anotar la misma cantidad de puntos que en 2010.
2012 fue la temporada en la que se vio la mejor versión de Sauber en toda su historia. Durante esa temporada, tanto Pérez como Kobayashi tuvieron en sus manos un coche competitivo que les permitió llevarse varios podios. Incluso estuvieron cerca de ganar en Malasia, pero Pérez no pudo hacer nada ante el Ferrari de Alonso. Al final de aquel exitoso año se ubicaron sextos con 146 unidades a su favor, cosechando la mayor cantidad de puntos en la historia de Sauber.
EL DECLIVE Y LA TRANSFORMACIÓN EN ALFA ROMEO
A partir de 2013, el equipo comenzó a entrar en un declive que se profundizó en 2016 y que poco a poco fue limitándole el presupuesto y que les dio más dolores de cabeza que alegrías. 2013 por su parte, fue la última temporada en la que Sauber se mostró en cierta medida competitivo puesto que quedaron relegados frente a McLaren y Force India entre otros. A partir de allí vinieron temporadas amargas donde solo pudieron rescatar migajas comparado a los años anteriores, y tuvieron que ser salvados por el grupo Longbow Finance.
Por lo tanto, a finales de 2017 se anunció la llegada de Alfa Romeo como socio técnico y comercial del equipo, pasándose a llamar Alfa Romeo Sauber F1 Team y funcionar como un equipo B de Ferrari. Tras las buenas actuaciones de Charles Leclerc a los mandos del C37, Sauber coronó su última temporada como tal gracias al octavo lugar que ostentó en la tabla de constructores.
Tras finalizar el 2018, Sauber se transformó en Alfa Romeo Racing y dejó tras 25 años de pasión, sacrificio y esfuerzo un legado que permanecerá en la memoria de los aficionados de la Formula 1. Si bien el nuevo Alfa Romeo Racing no es aquel equipo que se presentó en el GP de Sudáfrica en Kyalami allá por 1993, tiene los genes y las raíces de ese grupo humano que durante un cuarto de siglo se esmeró por destacar dentro de la máxima categoría.