Las gomas de Pirelli para 2018 serán más blandas y con más degradación

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Más blandos y con más degradación, pero a la vez resistentes al sobrecalentamiento. Mario Isola, jefe de Motorsport de Pirelli, ha adelantado los detalles de los neumáticos de Pirelli para la temporada 2018 de Fórmula 1. Los neumáticos ya están en fase de prueba con la colaboración de Ferrari y Antonio Giovinazzi en el Circuit de Barcelona-Catalunya (Montmeló).

El objetivo de la casa italiana es tener unos neumáticos más blandos. Quieren que el ultrablando actual pase a ser el superblando y así para los distintos tipos de carcasa que existen a día de hoy. Además esto no significa que solo cambie el color de las bandas sino que cambiará la composición de los neumáticos aunque manteniendo la misma base.

«En cuanto a los compuestos, puedo confirmar que estamos trabajando en compuestos que sean un paso más blandos. Eso significa que el blando actual será el medio de 2018, más o menos,» explicó ayer Mario Isola en el paddock del Cirucito de Hungaroring.

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«La construcción no será un gran cambio. Creemos que la estructura actual funciona bien, pero hemos visto margen de mejora para que el perfil funcione mejor, con una mejor distribución de la temperatura y la presión. Eso será de utiliadad para reducir el blistering, porque si tienes una temperatura genera más blistering. Veremos dónde tenemos esos picos de estrés y temperatura y los corregiremos un poco para el año que viene.»

En cuanto a la degradación, Pirelli busca un neumático con más degradación, aunque no tanta como en los primeros neumáticos que fabricaron para la Fórmula 1. Quieren que su comportamiento sea predicible para que los pilotos puedan exprimirlos al máximo.

«Queremos incrementar la degradación en la primera fase, esa degradación lineal que tienes entre un neumático nuevo y uno usado. Queremos incrementarla, pero no queremos tener el sobrecalentamiento que tuvimos el año pasado, porque es lo que los pilotos no quieren.»

«Los pilotos quieren forzar el neumático. Pueden aceptar la degradación porque es lineal, la pueden notar y pueden adaptar su estilo de pilotaje, pero no pueden aceptar el sobre calentamiento. Con eso pierdes rendimiento y en 2016 no podías recuperarlo.»

«Este año, cuando enfrías el neumático recuperas adherencia. Eso es algo que no queremos perder para el año que viene. Aumentar sólo la degradación térmica, pero que los neumáticos sean menos sensibles al sobrecalentamiento si es posible,» ha concluido Isola.

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