Red Bull tuvo un viernes para olvidar

Después de su gran actuación en Mónaco, Red Bull no ha tenido un buen viernes este fin de semana en Cánada. Ricciardo, tuvo problemas con el motor, por lo que sólo pudo dar ocho vueltas durante la segunda sesión. El australiano, que ya ganó en Montreal en 2014, se muestra seguro de sí mismo aunque no haya podido rodar:

«Rodamos poco por la mañana y por la tarde tuvimos problemas con el motor, pero lo positivo es que el ritmo de Max ha sido bastante bueno con los ultrablandos, así que espero que podamos aprender de esos datos para conseguir el equilibrio del coche para mañana y poder atacar»

«No creo que hayamos conseguido muchos datos, pero por lo menos Max dio bastantes vueltas sin problemas. No pasa nada por no haber rodado hoy casi porque conozco bien esta pista y me pondré las pilas mañana por la mañana».

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Verstappen sí que pudo rodar algo más. En los segundos libres dio 25 vueltas al trazado canadiense antes de sufrir graves problemas con la caja de cambio que le obligaron a dejar el coche en la curva siete. Provocó una bandera roja y, a partir de entonces, no se vio a ningún Red Bull en pista. Aún así, el holandés terminó la sesión quinto. Max está contento con su ritmo aunque todavía estén lejos de Mercedes y Ferrari:

«No ha sido el día más tranquilo posible, pero en cuanto al rendimiento creo que hemos cumplido. Antes del abandono en los Libres 2, teníamos una sesión positiva, y sentíamos que no estábamos lejos del Top 4 con nuestro ritmo, así que supongo que deberíamos estar contentos.»

«Las tandas cortas fueron bien a pesar de que las largas rectas serán complicadas para nosotros. No somos suficientemente rápidos para batir a los dos mejores equipos pero debemos optimizar nuestros recursos. Debemos investigar el problema que ha tenido el coche pero estoy seguro de que mañana estaremos listos de nuevo».