Fórmula 1
Ricciardo: «Magnussen se movió al frenar y un aviso no es suficiente»
Los bruscos movimientos de Kevin Magnussen hicieron que el director de carrera, Michael Masi, avisara por radio al equipo Haas. Este aviso, ha sido considerado por Daniel Ricciardo como insuficiente, tal y como reflejó los múltiples cambios de dirección del danés, y la posterior queja del mismo.
La realización del Gran Premio de Hungría, además de obviar la gran carrera de Carlos Sainz, nos mostró el intenso duelo entre Daniel Ricciardo y Kevin Magnussen. Como suele ser habitual con el danés, exprimiendo al límite el reglamento, las reacciones de los protagonistas no se han hecho esperar, resultando el piloto australiano el gran perjudicado.
El piloto australiano ha dejado claro que, en su opinión, Magnussen debía recibir algo más que una reprimenda tras sus bruscos movimientos defensivos. Más concretamente, los cambios de dirección en frenada, algo que el reglamento debe sancionar. Por otro lado, Ricciardo ha querido dejar claro que no tenía intención de protestar por radio, como finalmente sí hizo: “Dejé pasar los dos primeros (cambios de dirección), no entré en la radio, no soy de esos. Pero luego íbamos emparejados y me comprometió apretando hacia el interior de la curva, para mí se movía al frenar”
A la pregunta de los periodistas sobre si había ido a hablar con el danés después de la carrera, Ricciardo afirmó que esa era su intención, pero su equipo le recomendó que no lo hiciera: “Iba a hacerlo, pero me aconsejaron respirar profundamente y que lo dejara pasar” Lo que esta claro es que el danés realizó varios cambios de trazada en frenada, algo que Renault transmitió a los comisarios. El director de carrera Michael Masi únicamente impuso una reprimenda a Kevin, algo insuficiente para el australiano: “Definitivamente se movió más de dos veces al frenar, escuché que recibió una reprimenda, pero eso no es suficiente”
No ha sido el mejor fin de semana posible para Daniel, que tras la sanción por cambiar la unidad de potencia se vio obligado a jugársela con los duros en la salida. En palabras del propio Ricciardo, solo un milagro podía hacer que saliese bien el fin de semana: “Esperaba que sucediera algo increíble, pero sabía lo frustrante que podía ser. Creo que hubo momentos buenos así que no fue un desastre completo”