WRC
Sebastien Ogier gana de nuevo el Rallye de Montecarlo
Nada nuevo en el mundial de rallyes. Ogier mantiene su dominio férreo en la especialidad. El último de los cuatro días de competición en el Rallye de Montecarlo comenzaba con el francés al frente de la clasificación, seguido de Tänak y Latvala a nada menos que 33,5 s y 1 min 32,7 s. Todo un abismo teniendo en cuenta que el actual campeón del mundo se ha mostrado realmente intratable a lo largo de lo que va de rallye, y con tan solo cuatro especiales por disputarse. La lucha por el cuarto puesto se encontraba mucho más apretada entre Lappi y Meeke, separados por apenas 1,6 segundos.
En WRC2 Jan Kopecky hacía valer su dilatada experiencia, aventajando al inicio del día en más de 12 minutos a su más inmediato perseguidor, Guillaume de Mevius, mientras que en WRC3 las distancias eran aún más abultadas, liderando el italiano Enrico Brazzoli con más de 20 minutos de distancia respecto a Amaury Molle.
El primer tramo cronometrado del domingo, SS14 La bollene vesubie – Peira Cava 1, se presentaba realmente complicado y donde la elección de neumáticos, como suele ser habitual en esta cita del mundial, se hacía difícil y clave para afrontarlo con seguridad y confianza. Las declaraciones de los pilotos en el parque cerrado por lo general finalizaban con un “veremos”, indicativo de la complejidad de la decisión. Algunos pilotos, dada su casificación, se planteaban conservar neumáticos para atacar a fondo en la Powerstage, y de esta manera conseguir unos puntos extra que les permitiese compensar los problemas sufridos durante el conjunto del rallye.
Una vez comenzada la especial, se cumplían todos los pronósticos, agua, escarcha, nieve, hielo se sucedían a medida que se ascendía el mítico Col de Turini, llegando los pilotos a tener que reducir la velocidad de paso por curva a apenas 30 km/h en algunos puntos en la cima del puerto. A pesar de las complicadas condiciones, o gracias a ellas, Ogier hacía valer su maestría y experiencia y se llevaba el scratch, con Neuville segundo y Lappi tercero, distanciando aún más a Tänak y Latvala, a los que metía 11,5 y 22, 4 segundos respectivamente.
Ogier dejaba claro desde el principio que no iba a dejar que se le escapase este rallye de Montecarlo 2018.
En WRC2 Teemu Suninen marcaba el mejor tiempo con 15,2 segundos de ventaja respecto a Kopecky que centraba sus esfuerzos en no cometer errores y tirar por la borda el gran trabajo hecho hasta el momento. Este planteamiento lo compartía Enrico Brazzoli que hacía segundo en el tramo a 28,5 segundos de Taisko Lario pero que le permitían mantener la primera plaza del WRC3 holgadamente.
La siguiente especial, SS15 La cabanette – Col de Braus 1, seguía la misma tónica. Tramo muy complicado con zonas húmedas con escarcha y con algunas cunetas con tierra y ese peligroso y camuflado hielo negro. Sin embargo, el principal susto lo ha sufrido Ogier por culpa de una bengala encendida por un espectador en pleno vértice de una curva, que le ha dejado sin visión como consecuencia del fuerte contraluz que ha provocado el humo. No obstante, tras el deslumbramiento, el francés ha sido capaz de corregir a tiempo y salvar un accidente contra el talud de la carretera.
El scratch en este tramo ha caído del lado de Neuville, que completaba así un primer bucle del domingo muy fuerte. Segundo ha sido Mikkelsen y tercero Meeke, con Latvala recuperando 3,4 s a Ogier y 4,6 a Tänak. Era evidente que Ogier se sentía cómodo con el coche porque dada la ventaja de que disponía no necesitaba arriesgar en absoluto, y a pesar de ello continuaba metiendo tiempo al segundo.
En WRC2 se repetían las dos primeras posiciones aunque con solamente 3,2 segundos de pérdida por parte de Kopecky. En WRC3 Brazzoli se resarcía y aventajaba a Lario en 30,3 segundos.
El segundo paso por La bollene vesubie – Peira Cava 2 constituía la tercera especial del día, y decimosexta del rallye. El cielo se encontraba soleado, pero a pesar de ello la cumbre del Turini continuaba muy resbaladiza y con hielo. Una situación en la que era fácil cometer errores por confiarse.
Bryan Bouffier se ha ido largo en una curva y ha queda atrapado en un banco de nieve pero ha logrado volver a la carrera sin aparentes daños en el coche. Neuville ha sufrido problemas en la misma curva aunque solo se ha cruzado un poco de más y se apoyado en el banco nieve. Lappi por su parte, también se ha salido en el mismo punto pero no llegado a necesitar ayuda del público para salir, como le había pasado a Bouffier. Ogier ha trazado ligeramente largo algunas curvas pero sin llegar a salirse de la carretera en ninguna de ellas.
Scratch nuevamente para Neuville, seguido de Evans y Breen. Ogier añadía 1,5 segundos de ventaja respecto a Latvala y 11,7 a Tänak. Si no sufría ningún percance durante la Powerstage, el rally era claramente suyo.
Sin cambios en las dos primeras posiciones del WRC2, Suninen y Kopecky lideraban la especial en su categoría, mientras que en WRC3 Lario volvía a quedar por delante de Brazzoli.
La powerstage la constituía el último tramo del día, La cabanette – Col de Braus 2, y en ella se otorgaban 5, 4, 3, 2 y 1 puntos a los cinco primeros clasificados de la especial.
Aparentemente las condiciones del asfalto habían mejorado respecto a la pasada de la mañana, pero los pilotos tenían que seguir con cuidado en zonas de sombra con humedades y tierra en las cunetas.
Mikkelsen ha conservado neumáticos en las tres primeras especiales para atacar en esta especial, sin embargo solamente ha logrado su objetivo parcialmente, siendo tercero.
Segundo en el tramo ha sido Thierry Neuville, cuyo ataque le ha permitido superar a Evans en la general por tan solo 1 segundo. Esto no lo ha logrado únicamente en la powerstage, el belga ha recuperado de forma constante durante toda la jornada, y de no haber sufrido los problemas de los días precedentes hubiera luchado por el podio sin problemas.
El scratch en el tramo, y por tanto los 5 puntos adicionales, lo ha conseguido Kris Meeke, lo que le ha permitido aprovechar el error cometido por Lappi para alzarse hasta la cuarta plaza general. El finlandés se iba largo en una curva a derechas que presentaba tierra en el interior y que no tenía apuntada en las notas, perdiendo tiempo al engranar la marcha atrás en su Yaris. Este error le ha supuesto nada menos que tres posiciones en la general. “No puedo describir lo disgustado que estoy” declaraba el finlandés en meta.
Por su parte Latvala casi sufre las mismas consecuencias que su compañero de equipo en el mismo punto, si bien él ha sido capaz de recuperar el control del coche in extremis, llegando a meta con el cuarto mejor tiempo en la Powerstage y conservando la tercera plaza de la general en la que partía por la mañana.
Tänak se ha quedado a las puertas de conseguir puntos en la última especial del rallye, siendo sexto tras Ogier. El estonio ha alcanzado el segundo escalón del podio en su primera carrera con el Toyota y superando a su experimentado compañero Latvala. Sin duda es un gran resultado para este piloto.
Ogier ha ganado nuevamente el rallye de Montecarlo, lo que supone su quinto entorchado en esta prueba. Supera así a leyendas como Walter Röhrl, Sandro Munari y Tommi Makkinen y se queda a tan solo dos del máximo dominador de la prueba, Sebastien Loeb.
El actual campeón ha dominado claramente, y cuando ha cometido errores, como han tenido todos sus rivales, ha tenido la suerte del campeón y no ha perdido una cantidad tiempo irrecuperable, como lo demuestra su victoria con casi un minuto de ventaja sobre el Toyota de Tänak.
El francés de Ford suma a los 25 puntos de la general, el punto adicional que otorga la quinta plaza en la Ppowerstage, colocándose así líder provisional con 26 puntos. Segundo es Tänak con 18 y tercero Latvala con 17.
En cuanto a las categorías WRC2 y WRC3 no ha habido sorpresas, consiguiendo la victoria en cada una de ellas Jan Kopecky a los mandos del Skoda Fabia R5, y Enrico Brazzioli en su Peugeot 208 R2.
Desde MomentoGP mandamos nuestras felicitaciones a los campeones, y les esperamos en la próxima cita del mundial, que tendrá lugar entre los días 15 y 18 de febrero en Suecia.