Fórmula 1
Top 3 de las mejores carreras de esta temporada
La Fórmula 1 ha llegado a su parón veraniego con algo más de media temporada consumida. Durante este ‘primer stint’ de la temporada, nuestro deporte favorito, nos ha dejado momentos para el recuerdo. 6 cambios de líder en la clasificación por pilotos y una serie de maravillosos golpes de efecto.
Desde MomentoGP queremos hacer una retrospectiva y recordar, en esta publicación, parte de lo vivido hasta el día de hoy, en esta temporada 2018.
En esta retrospectiva, el que hoy teclea, ha seleccionado las que a su parecer, han sido las 3 carreras más emocionantes de este 2018. Si todo acaba como parece ser, alguien entrará en el olimpo de los dioses, igualando a Juan Manuel Fangio Déramo con 5 entorchados.
Como podréis ver, esta publicación es totalmente subjetiva, ya que cada uno de vosotros queridos amigos, tendréis una visión personal de cada gran premio. Los aquí expuestos hoy, pueden pareceros más aburridos o menos importantes, por eso os agradeceré que cada uno de vosotros exponga, en comentarios, que carrera de este año es digna de figurar aquí.
Y sin más preámbulos ‘nos metemos en harina’, las tres carreras elegidas las expondremos por orden cronológico, por lo que no es un ‘Ranking’ de las más divertidas.
El GP de China era la tercera cita del calendario 2018, tras Australia y Bahréin, y nos dejaría el primer gran premio espectáculo del año. Daniel Ricciardo ganaba tras salir 6°, realizando una gran serie de adelantamientos, sin importarle el nombre de sus contrarios.
Con un Hamilton desaparecido, Mercedes jugaba la carta de Bottas, con una buena estrategia conseguían adelantar, mediante un ‘overcut’ a los Ferrari. La carrera prometía para los de Brackley hasta la vuelta 30, cuando los dos Toro Rosso se tocaban en la penúltima curva del circuito, Pierre Gasly golpeaba a Brendon Hartley, dejando muchas piezas sobre el asfalto. Sainz solicitaba el Safety Car, que salía a pista.
Red Bull, más hábiles que nadie, calzaban a sus pilotos con gomas más blandas. Ricciardo aprovechaba la situación, realizando una remontada que le llevaba a la primera posición a falta de 11 vueltas. Primer ‘Shoey’ del año.
Por su parte, Max Verstappen, cometía varios errores, llegando a tocar a Vettel, a quien los daños producidos le harían caer al octavo puesto, tras Alonso. Estos errores del holandés le llevarían a la 5° posición.
Tras China, nuestro siguiente Gran Premio apasionante llegaría en Bakú. El GP de Azerbaiyán nos levantaría del asiento ya en la primera vuelta.
Una serie de toques, entre los Forces Indias, Ferraris, Renaults, Williams y McLarens, acababan con Fernando Alonso dando toda una vuelta al circuito sobre 2 ruedas. Alonso peleaba de forma épica con su MCL33 para hacerlo girar. Tras pasar por boxes, y volver a montar su coche, Alonso conseguía acabar 7°.
Y no sólo la salida. Durante la carrera, los pilotos de Red Bull, se mantenían en una pelea constante, durante 34 vueltas. ¿Sólo 34?, si, ya que precisamente en esa vuelta, tras varios intentos, Ricciardo tenía claro que iba a adelantar a final de recta. Por contra, Verstappen, tenía claro que su compañero no le iba a adelantar. Al final de recta, Ricciardo se movía tras Verstappen que, realizando varios cambios de trayectoria, conseguía que su compañero no lo pasase. A costa de abandonar ambos. Ricciardo se llevaba puesto a Verstappen en la primera curva.
El incidente de los Red Bull obligaba a sacar a pista al Safety Car, por los restos dejados en pista y por la situación de los dos monoplazas de Red Bull. Durante este período de Safety Car, Romain Grosjean, realizando unos ‘burnouts’ estrellaba su coche. La radio de Grosjean se abría para culpar a Ericsson. Nada más lejos de la realidad, el piloto francés tocó el repartidor de frenada (por error) y cambió el balance a sus ruedas traseras. Al frenar, ya sabemos lo que pasó.
Con la reanudación del Safety Car, el doblete de Mercedes parecía claro. Bottas lideraba, realizando una gran carrera, con Hamilton detrás y Kimi Raikkonen en tercera posición. Vettel rodaba 4°, tras un error al tratar de adelantar a Bottas.
El finlandés de Mercedes se las prometía felices pero, al pasar por la zona donde se habían tocado los Red Bull, pisaba algún trozo que no había sido retirado de la pista. Bottas abandonaba, destrozado, una carrera que se le ponía de dulce.
Hasta el final, Lewis lideró con Raikkonen a su espalda y con Checo Pérez que, muy astuto, robaba la tercera posición a Sebastián Vettel.
La tercera y última, recordamos que por orden cronológico, es la cercana carrera del GP de Alemania. Parecía un Gran Premio tranquilo, sin líos en la salida, con todo el mundo muy tranquilo. Lewis, siguiendo el guion, remontaba desde la 14° posición obtenida por problemas el sábado.
Alrededor de la vuelta 27 empieza el movimiento en pista. Ricciardo se ve obligado a abandonar mientras que, en Ferrari, a Kimi Raikkonen le abre la radio Jock Clear, hasta en dos ocasiones, para soltarle lo que el piloto, por su forma de ser, consideraría ‘un ladrillo’. Kimi indica que le digan, claramente, que es lo que hay que hacer. Clear le vuelve a soltar ‘otro ladrillo’ y Kimi, que ya sabe lo que hay, le contesta, textualmente, “¿Qué quieres que haga? ¿Qué lo deje pasar? ¡Sólo dímelo!”. Efectivamente, Sebastian pasa a liderar el Gran Premio de casa.
Pasada la mitad de la carrera, comenzaba a llover, en una zona muy localizada del circuito. En concreto, en el último tercio de la parabólica y la horquilla. Varios pilotos instalaban intermedios, entre ellos Alonso o Verstappen, mientras que por delante se seguía con los de seco.
Quien mejor aprovechaba la situación era Hamilton, rodando 1’5 segundos más rápido que los que iban con secos. Vettel, que lideraba la carrera, se salía completamente solo en Sachs, y mostraba su frustración golpeando repetidamente su volante.
La salida de Vettel obligaba al Safety Car a salir a pista, en principio, Hamilton estuvo a punto de ir a boxes, pero una hilarante conversación del inglés con su ingeniero dio con el piloto entrando al carril de boxes y saliendo del mismo, cruzando el césped. Esta maniobra estuvo en boca de todos hasta que, tras la carrera, FIA confirmaba que no había sanción.
Así, Hamilton seguía segundo, tras Raikkonen que después entraría a boxes cediendo la primera posición al de Stevenage, que no la soltaría hasta el final.
Os recordamos que esta publicación es totalmente subjetiva, y esperamos también vuestra opinión, que podéis dejar justo debajo es estas líneas.