Un lavado de cara para Australia

Sólo una semana de test ha bastado para que los más críticos y los oportunistas aprovecharan el mal inicio de McLaren para poder poner sal en una herida que parecía poder cerrarse en 2017 pero a la que de momento le han saltado los puntos de sutura. Nada que no sea solucionable apuntan desde las entrañas de Woking, pero que de momento y hasta el inicio de la segunda semana de test, es un pozo de críticas inacabables.

El motor Honda sigue verde, y a estas alturas mosquea a más de uno. Rodando sin poder exprimir el motor al máximo, Mclaren fue el segundo equipo que menos vueltas dio en la primera semana de pruebas en Montmeló, aunque según declaraciones de Boullier, el monoplaza que traen a los tests no tendrá nada que ver con el que se podrá ver en la primera carrera de 2017 en el circuito de Albert Park: «Tuvimos una versión de prueba aquí, por lo que creemos que somos parte de los pocos equipos del paddock que irá a Australia con, no diría una especificación B, pero sí un coche que estará muy cambiado», afirmaba el director deportivo de McLaren.

Foto: Reuters

Pese a no ser el coche definitivo, Boullier lamentó todos los problemas que surgieron durante la semana pasada: «Hay muchas pequeñas cosas por todos lados. El miércoles tuvimos dos o tres problemas en el coche, los típicos de los primeros días, pero deberían haber ocurrido el primer día, no el tercero. Eso es por lo que no hemos rodado tanto cuanto queríamos», comentaba Boullier que quiso remarcar que no existe falta de comunicación con Honda: «Tenemos mucha gente a tiempo completo en Sakura representando a McLaren, como ellos tienen gente en Woking. También tienen una sede en Milton Keynes, que incluye un departamento de ingeniería que va a los test y a las carreras. Con tecnología, emails, videoconferencias, todo es más cómodo», comentaba Boullier.

Boullier: «No hemos rodado lo que queríamos»

A todo esto, Fernando Alonso en su directo realizado mediante Instagram confirmó las palabras de su director deportivo: «El chasis es bueno, tiene buena base y buen agarre en curva. Pero en Australia tendrá poco que ver el coche con el de los test, como les pasa a todos, así que ese tendrá aún más grip», declaraba el español.

Un voto de confianza para los de Woking, al menos hasta el Gran Premio de Australia, fecha inequívoca para situar donde se encuentran los Mclaren.