Vijay Mallya, jefe de Force India, arrestado en Londres

Hoy, martes se conocía la noticia del arresto de Vijay Mallya por la policía londinense. Ha ocurrido en Londres, Reino Unido, donde estaba residiendo después de que huyera de su país hace más de un año por impagos y acusaciones de fraude.

India canceló el pasaporte de Mallya en abril del año pasado después de que un tribunal emitiera una orden de detención. El Ministerio de Relaciones Exteriores indio al escuchar esta orden pidió a Gran Bretaña que lo deportasen.

Pues ha ocurrido hoy cuando la unidad de extradición de la Policía Metropolitana ha detenido a Mallya «en nombre de las autoridades indias por acusaciones de fraude» emitía en un comunicado la policía.

«Oficiales de la Unidad de Extradición de la policía metropolitana han arrestado este martes por la mañana a un hombre bajo orden de extradición». El indio deberá acudir a los tribunales de Londres y comparecerá en la corte de Westminster a lo largo del día.

Sin embargo, en su cuenta personal de Twitter, el señor Mallya publicó un tweet a mediodía y descartó las noticias como «bombo mediático». Además, asegura que la extradición comenzaba el martes como era de esperar.

También ha querido contradecir las acusaciones hacia él, diciendo que él viaja «a India y desde India con frecuencia. No huí y tampoco soy un fugitivo. Chorradas».

El magnate es poseedor de de la marca Kingfisher y distribuye una gran cantidad de productos, como alcohol, productos químicos o fertilizantes. Después de la crisis de 2008, fundó una compañía aérea del mismo nombre. Fue un proyecto ambicioso que acabó con grandes deudas y, después de varios años, cesó sus operaciones en 2012. La marca se endeudó y ahora debe miles de millones. Se habla que Mallya debe acerca de 1.300 millones de dólares a prestamistas, acreedores y empleados.