Williams cierra la parrilla

En un inicio de campeonato más que complicado para Williams, los de Groove no tenían más objetivos que entender y exprimir el coche al máximo dado lo lejos que se encuentran de buscar cualquier pelea. Cierran la parrilla con George Russell y Robert Kubica, éste con algunos problemas más allá del rendimiento del monoplaza. 

Desde el lado técnico, ven cómo los cambios que hicieron durante las últimas sesiones de libres han hecho la función que esperaban. Dave Robson, ingeniero superior de carreras, explicó los detalles y el trabajo que lograron:

«Realizamos un buen trabajo anoche sobre la base de los experimentos que hicimos ayer», dijo. «Los Libres 3 fueron buenos, ya que ambos pilotos estaban razonablemente contentos con el coche hacia el final de esa sesión. Al entrar en la calificación, el ritmo del coche estaba donde esperábamos que estuviera, pero no obstante hicimos un buen trabajo para sacarlo todo. George estuvo muy contento con el coche durante la calificación y aprovechó al máximo lo que teníamos, aumentando progresivamente durante la Q1″.

Williams

«Fue una calificación extremadamente buena para su debut en la Fórmula Uno. El plan de carreras de Robert también fue completar tres carreras en la Q1, pero fue una pena que tuviera un pinchazo en su última vuelta, lo que significaba que no podíamos ver su mejor momento. Fue un buen paso adelante cuando tuvo el problema, tengo todas las razones para pensar que hubiera sido muy cercano a George al final. En general, un buen día operacional para nosotros considerando el ritmo del coche, ya que obtuvimos todo lo que pudimos obtener de él. Estamos listos para aprovechar eso mañana y ver si nos viene algo de suerte».

George Russell, lejos de hacer algo más cercano a objetivos ambiciosos, se mostró satisfecho por los cambios logrados, pero las conclusiones son claras: «Se sintió una muy buena vuelta, conduciendo alrededor de una mega pista en plena actividad», dijo. «Di tres vueltas ordenadas y estoy contento con mi propia actuación, pero obviamente somos un equipo y queremos presionar más. Los muchachos a mi alrededor, los ingenieros y yo, hicimos un gran trabajo para sacar todo del paquete que tenemos. Todo lo que puedo hacer es conducir lo más rápido que pueda, y sentí que lo hice», explicó.

Robert Kubica, como en cada sesión hasta ahora, se vio en el último lugar de la parrilla con la única meta de aprender todo lo que el coche le puede dar y sacar todo el provecho posible en estos momentos. Un pinchazo a final de la Q1 le costó alguna décima más. «No fue el mejor comienzo de la temporada, especialmente porque soy el último en la parrilla», abrió. «Cometí un error en la última tanda cuando tuve una buena sensación y podía manejar mejor el coche. Me disculpo por eso, pero así es como fue. Ha sido una situación difícil, pero estoy de vuelta en la parrilla y me gustaría agradecer a todos los que lo han hecho posible, así como al equipo».